martes, 28 de junio de 2011

Gracias!

Creo que lo que viví durante estos 15 meses fueron los más difíciles de mi vida hasta el día de hoy. Pero nada de esto hubiera sido posible superar si no fuera por el amor que tengo hacia mamá, y la ayuda de los seres queridos.

Tantos pasillos recorrí con muestras de sangre y medicamentos en mano, y no dejaba de tararear "Every Little Thing Is Gonna Be Allright".

Tantas veces recordé haber leído a Platón, en donde habla del amor, que el amor es dejar libre al ser que amás. Y tantas veces imploré a Dios (sin ser demasiado practicante) en que ponga fin al sufrimiento de mamá, y que descanse en paz en algún lugar del universo. Estuve dispuesta cientos de veces a renunciar a tenerla conmigo a cambio de su paz. Ese día llegó, mamá dijo BASTA y ganó la batalla, porque ella ahora descansa de todo sufrimiento y dolor.

Una parte de mi corazón está muy triste, porque ya no podré sentir el calor de sus brazos nunca más en esta vida, pero por otro lado, no pude evitar sentirme feliz, porque ya no la voy a ver llorar. Es la primera vez en mi vida que tengo una sensación tan agridulce.

No quiero hacer luto, porque ella no me lo hubiera permitido si tuviera la posibilidad de hablar conmigo. Quiero seguir con mi vida, dar lugar a las cosas que no pude durante el tiempo que la cuidé. Terminar la carrera, mejorar mi rendimiento en el trabajo, dormir hasta tarde, sonreir más.

Tantas noches imaginé en las cosas que haría el día en que ella deje este mundo, anotaba en una hoja cosas como: Llamar a la funeraria antes de las 2 horas de su partida, a todas las personas que deseen ir al funeral que lleven flores, comprarle alguna ropa con encaje en vez de que use la mortaja, maquillarla, pintarle las uñas, no llorar demasiado y dormir con ella en el salón velatorio.Esos detalles los repasaba en mi cabeza cada vez que ibamos al hospital y los doctores decían que "esa sería su última noche"... fueron tantas noches las ultimas noches con mamá... que las he disfrutado todas. He cumplido en su mayoría.

Lo que nunca me puse a pensar, fue en lo que haría y en lo que sería de mi vida sin ella. Sin sus ojos verdes, sin su rubia cabellera, sin su sonrisa de cuarto creciente. Y eso es lo más difícil el día de hoy, vivir sin ella. Pero sé que no será imposible ser la misma chica fuerte de hace una semana atrás, porque del amor voy a tomar fuerzas para luchar por lo que me queda, mis afectos.

Renuncié a ella para tenerla conmigo en el corazón y en mis sueños. Y tengo la certeza que ella sonríe.

Gracias a todos por el increíble apoyo que recibí durante 15 meses. Gracias a todos por cargarme el corazón de buenos deseos.

Gracias.

jueves, 16 de junio de 2011

Buscamos diseño!

Luego de casi 4 años, Muy Poderosa está buscando diseño, busca forma y colores. Si existe alguien quien quiera darle vida de manera voluntaria, o por un ñoño, estaremos agradecidas. Gracias!