El 2010 estallaba en llanto tal cual recién nacido y me decía a mi misma: Este será mi año... Rondaba el mes de enero y febrero y yo refugiada en el pelopincho bajo el mango de casa con un calor que rondaba los 49°.
Seguía en el mismo laburo de hace tres años, trabajaba como Auxiliar Informática en la Farmacia Interna del Hospital Central de IPS. En plena ola de calor a mamá se le diagnostica cáncer, yo rogando vía twitter por donantes de sangre y durmiendo sobre el escritorio de la oficina por las noches, mientras mamá se sometía a análisis, tranfusiones y medicaciones dos pisos más arriba.
Un mes después, el día de la última quimioterapia de mamá presento mi renuncia al Hospital y parto a un nuevo trabajo en la Gerencia de Comunicación del Club Centenario.
Gastón cuando eso tenía tres meses de nacido, el moreno de ojos verdes más lindo del mundo me robaba lágrimas de emoción. El 4 de mayo a las 17:00 su papá dejaba este mundo para cuidarlo desde arriba. Y yo asumía el cargo de Asistente de Comunicación, Mamá de mi mamá y papá de Gastón.
Remaba sin rumbo, sin saber qué me deparaba...
Un mes después, Paraguay jugaba su primer partido contra Italia en el Mundial y yo estaba sin trabajo, disfrutando del partido en el Bolsi con Jazmín. Ahí supe lo que era VoriVori y una semana después luego de haber ido a varias entrevistas de trabajo y haber rechazado volver a ser Asistente del Club, me inicié como CM en la Agencia Interactiva VoríVorí, en mi primer día de pasante ya guioné 4 cortos y con el transcurso de los meses y todo lo que conocía de comunicación, aprendí sobre el nuevo mundo de las Redes Sociales.
Pasaban los meses y mi blog, este mismo, quedaba entre los 50 mejores del país, concurso organizado por ÚltimaHora.com y me dije: Porqué no? Sólo que por falta de tiempo no puedo realizar mis proyectos, pero están ahí, presentes!
Luego Guri de buena onda me invitó a colaborar con DementesX y volví a mi amor por la redacción y entrevistas.
Mil ideas recorren en mi cabeza y eso es lo importante, no bloquearse.
A finales de agosto estuve colaborando en el Día del Blog Paraguay, dónde la pasión por la lectura y la lectura me llevaron a dar una manito, dónde conocí a genios y personas realmente admirables!
Tuve la oportunidad también de retomar un viejo amor, el teatro, de paso conocí las penitenciarias por dentro, y fue una bofetada la realidad en la que viven, sólo podía agradecer por mi familia, mi formación, mis valores y la posiblidad de viajar en colectivo con total libertad.
Gastón el próximo sábado cumple su primer añito de vida, le dice - Papá - a su abuelo materno y tiene los dientecitos separados. Mamá está mejor del cáncer pero con dolores en la cadera a consecuencia de los tratamientos. Pero seguimos ahí... luchando y remando.
Si el día de hoy estoy firme y con garras para seguir peleando, es gracias a la incondicionalidad de Memo, que se bancó todas mis crisis emocionales y me sostuvo para no caer, sin restar importancia a las incontables palabras de aliento de mis mejores amigas y amigos que siempre están ahí presenten truene, llueva o relampaguee.
Tipeando estas últimas palabras me doy cuenta de que si... Si fue mi AÑO, porque me hice más fuerte que nunca, me doy cuenta que ninguna boludés me va a hacer caer y si me caigo me levanto de nuevo sin dudar. Si fue mi año, porque encontré lo que me gusta en mi nuevo trabajo, conocí personas geniales e increíbles y me conocí a mi misma sobre todas las cosas.
Tal vez no farreé mucho, ni viajé, ni me forré de guita, pero estoy segura de que nada me va a hacer caer.
Y la actitud es lo que importa.
