miércoles, 6 de abril de 2011

Culpable soy yo, por no demostrarte mi amor más de lo que puedo.


Hay días en que me sobran las fuerzas y la paciencia, hay días en que ya no queda nada.
Hay días en los que agradezco a Dios por todo lo que se ha logrado, y no faltan los días en que niego su existencia.
Hay días en que la quiero culpar de todo, pero seguirán sobrando los días amándola, extrañándola completa.
Hay días en la que la culpo de su ignorancia, por haber puesto en riesgo su vida...
Pero ¿Cómo culpar a la ignorancia de una mujer que olvidó sus estudios por cuidar de sus hiijas las 24 horas del día?
¿Cómo culpar a una mujer que se quedó sin dientes por pagarnos la mejor educación?
¿Cómo culpar a la ignorancia de una reina que renunció a los lujos y a su belleza para hacernos princesas?
¿Cómo culpar a una mujer que se crió entre vacas y gallinas que nos enseñó sobre el mundo a través de sus ojos?
Cuando una madá se va, no sólo abandona su cuerpo y el mundo... También deja huérfanos, viudos, abuelas desconsoladas, sueños inconclusos.
Todos necesitamos de una madre para toda la vida.
Besarías esta noche los ojos de tu mamá al regresar a tu hogar?
Yo lo hago todas las noches, las que quedan, y las mañanas en las que ilumina la habitación con su amor.

4 comentarios:

Abriles dijo...

llegas al alma, niña, niñita, tus palabras claman arrullo..

Fuerza

Paola dijo...

Suscribo realmente llega al alma tus palabras y dan muchas ganas de difundir este tipo de palabras tan sinceras,llenas de realidad y puro corazon! Aprobado con aplausos! me encanta...no dejemos que la rutina le gane a los pequeños momentos de afecto que hacen una gran diferencia en nuestra vida! Gracias por tan lindas palabras ;)

"Los Viernes son sagrados" dijo...

sencillamente emotivo... ojala tuviera a mi madre conmigo para besarla y abrazarla porque la extraño... éxitos niña!!!

EL ESCRIBIENTE dijo...

Como diria el poeta, "los versos caen al alma, como al pasto el rocío", no estoy seguro si asi esta escrito pero la idea es la que siento al leer tus escritos, acaricia el alma profundamente y la vuelve mas humanamente hacia el Dios que existe el único Eterno, anclamos en El, nuestra Esperanza.